jueves, 3 de septiembre de 2020

TESTIGOS

 El profesor y el periodista pasean por el jardín. En eso, Jean-Marie Pelt, el profesor, se detiene, señala con el dedo y dice: — Le presento a nuestras abuelas.

 Y el periodista, Jacques Girardon, se agacha y descubre una bolita de espuma que asoma entre los pastos. Es un pueblo de microscópicas algas azules. En los días de mucha humedad, las algas azules se dejan ver. Así, todas juntas, parecen una escupida. El periodista frunce la nariz: el origen de la vida no tiene un aspecto muy atractivo que digamos, pero de esa baba, de esa porquería, venimos todos los que tenemos piernas, patas, raíces, aletas o alas. 

Antes del antes, en los tiempos de la infancia del mundo, cuando no había colores ni sonidos, ellas, las algas azules, ya existían. Echando oxígeno, dieron color a la mar y al cielo. Y un buen día, un día que duró millones de años, a muchas algas azules se les dio por convertirse en algas verdes. 

Y las algas verdes fueron generando, muy poquito a poco, líquenes, hongos, musgos, medusas y todos los colores y los sonidos que después vinieron, vinimos, a alborotar la mar y la tierra. 

Pero otras algas azules prefirieron seguir siendo como eran. Así siguen estando. 

Desde el remoto mundo que fue, ellas miran el mundo que es. 

No se sabe qué opinan.

EDUARDO GALEANO

3 obras de Eduardo Galeano que debes leer

sábado, 27 de junio de 2020

Manuel José Joaquín del Corazón de Jesus Belgrano





Como ocurió con San Martín, la historia oficial encontró en el homenaje formal de los monumentos, las calles y avenidas, la forma de ignorar a este enorme argentino que no tiene su dia en el calendario oficial. El día de su muerte fue instituído como el dia de la bandera, símbolo no muy tenido en cuenta por los argentinos, mas allá de los festejos deportivos. Estamos a tiempo de corregir la cuestión. Podríamos, por ejemplo, modificar la fecha de celebración del dia de la industria-que hasta hoy recuerda "la primera exportación argentina al exterior el 2 de septiembe de 1587" y que, en realidad, se trató de un hecho de contrabando concretado por el obispo Francisco de Vittoria, por el 3 de Junio, dia del nacimiento del primer promotor de la industria nacional, Manuel Belgrano
Este joven miembro de una de las familias "mas acomodadas" de Buenos Aires bien pudo haber utilizado su título de abogado obtenido en España para tener un buen pasar en Europa o para continuar con los negocios familiares en Buenos Aires, pero decidió ponerse a disposición del cambio de las injustas condiciones de vida, de la modernización de la economía, del impulso de las nuevas ideas en la industria en su tierra, que por entonces estaba muy lejos de constituirse en una nación.
Lo hizo en medio de un régimen colonial que iba en exacto sentido inverso a sus intenciones. Pero ese enorme obstáculo, lejos de desanimarlo, pareció estimularlo a dejarnos cada año un plan de gobierno en sus Memorias del Consulado
Allí se ocupó de los temas que deberían ocupar a un verdadero estadista: la agricultura, la ganadería, la situación de los campesinos, las vías de comunicación, las razas ovinas y bovinas mas convenientes para nuestro campo, la introducción de nuevos cultivos, el fomento permanente de la industria y sobre todo de la educación, a la que entendía como necesariamente gratuita y obligatoria en igualdad de condiciones para niños y niñas, hombres y mujeres
Su lucha fue no solo la evidente de sus grandes victorias y derrotas militares, sino la cotidiana contra la incomprensión y la enemistad manifiesta que siempre le prodigaron los poderosos, "los partidarios de sí mismos", como él los definió, magníficamente

                                 del libro Manuel Belgrano 
                                                El hombre del bicentenario por Felipe Pigna

viernes, 15 de mayo de 2020




Canción del esposo soldado
He poblado tu vientre de amor y sementera,
he prolongado el eco de sangre a que respondo
y espero sobre el surco como el arado espera:
he llegado hasta el fondo.
Morena de altas torres, alta luz y ojos altos,
esposa de mi piel, gran trago de mi vida,
tus pechos locos crecen hacia mí dando saltos
de cierva concebida.
Ya me parece que eres un cristal delicado,
temo que te me rompas al más leve tropiezo,
y a reforzar tus venas con mi piel de soldado
fuera como el cerezo.
Espejo de mi carne, sustento de mis alas,
te doy vida en la muerte que me dan y no tomo.
Mujer, mujer, te quiero cercado por las balas,
ansiado por el plomo.
Sobre los ataúdes feroces en acecho,
sobre los mismos muertos sin remedio y sin fosa
te quiero, y te quisiera besar con todo el pecho
hasta en el polvo, esposa.
Cuando junto a los campos de combate te piensa
mi frente que no enfría ni aplaca tu figura,
te acercas hacia mí como una boca inmensa
de hambrienta dentadura.
Escríbeme a la lucha, siénteme en la trinchera:
aquí con el fusil tu nombre evoco y fijo,
y defiendo tu vientre de pobre que me espera,
y defiendo tu hijo.
Nacerá nuestro hijo con el puño cerrado
envuelto en un clamor de victoria y guitarras,
y dejaré a tu puerta mi vida de soldado
sin colmillos ni garras.
Es preciso matar para seguir viviendo.
Un día iré a la sombra de tu pelo lejano,
y dormiré en la sábana de almidón y de estruendo
cosida por tu mano.
Tus piernas implacables al parto van derechas,
y tu implacable boca de labios indomables,
y ante mi soledad de explosiones y brechas
recorres un camino de besos implacables.
Para el hijo será la paz que estoy forjando.
Y al fin en un océano de irremediables huesos
tu corazón y el mío naufragarán, quedando
una mujer y un hombre gastados por los besos.          Por Miguel Hernández

Muerto de tuberculosis en las mazmorras de Francisco Franco Bahamonde
El 28 de Marzo de 1942…..Josefina Manresa fue su esposa